Después de las navidades, hay quien quiere someterse a una dieta breve para perder algunos kilos que se han cogido por lógica. Sin embargo, estamos en invierno y no hay que volverse locos. No hay nada como el pescado blanco para llevar una dieta equilibrada. El pescado blanco tiene numerosas propiedades y beneficios para la salud, siendo tu gran aliado para llevar una vida sana. Te puede ayudar a perder peso, con la digestión, a regular tu sistema nervioso y mucho más. El pescado blanco es bajo en grasas y calorías, lo que lo convierte en una opción ideal para quienes buscan mantener o perder peso y seguir una dieta equilibrada, ya que a pesar de su bajo nivel de calorías y grasas tiene una gran cantidad de nutrientes.

Además, es rico en proteínas, porque uno de los principales beneficios del pescado blanco es precisamente ese: su alto contenido de proteínas de alta calidad. Las proteínas son fundamentales para el crecimiento y la reparación de los tejidos, así como para la producción de enzimas y hormonas. El pescado blanco es fácil de digerir, lo que lo convierte en una opción ideal para personas que enfrentan problemas digestivos. Su textura suave y su bajo contenido en grasa lo hacen menos pesado para el estómago en comparación con otros tipos de alimentos.

Esto significa que es menos probable que cause malestar o indigestión, lo que es especialmente beneficioso para quienes sufren de condiciones como gastritis, síndrome del intestino irritable o simplemente tienen un sistema digestivo sensible. Por lo que el pescado blanco para no sobrecargar el sistema digestivo mientras permite una alimentación rica en nutrientes. Otro gran beneficio es que el consumo regular de pescado blanco puede ser muy beneficioso para la salud del corazón, la salud cerebral y la ocular y ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas , gracias a su perfil nutricional.

Este tipo de pescado incluye variedades como el bacalao, la merluza, el lenguado y el fletán, que son conocidas por sus múltiples beneficios para la salud cardiovascular, por su bajo contenido en grasas y alto en vitaminas y minerales. El pescado blanco, como el bacalao y la merluza, beneficia la salud cognitiva y ayuda a prevenir enfermedades neurodegenerativas debido a su perfil nutricional. Contiene ácidos grasos omega-3 que protegen el cerebro, vitaminas del grupo B que apoyan la función neuronal y antioxidantes como el selenio que combaten el estrés oxidativo, previniendo el deterioro cognitivo.

Algunos estudios sugieren que los ácidos grasos pueden desempeñar un papel importante en la protección de la salud ocular. Estos ácidos grasos ayudan a mantener la estructura y función de las células de la retina, lo que puede reducir el riesgo de desarrollar degeneración macular relacionada con la edad. Además, tienen propiedades antiinflamatorias que pueden contribuir a la salud general de los ojos, disminuyendo la incidencia de enfermedades oculares crónicas y mejorando la visión a largo plazo.

¿Cómo se diferencia un pescado blanco de uno azul?

A nosotros nos encanta esta pregunta y nunca nos cansaremos de escucharla. Muchas veces podéis tener problemas a la hora de comprar pescados blancos ya que podemos tener dudas de si el pescado que estamos consumiendo es blanco o azul. Ambos, sin duda, son muy beneficiosos para la salud, pero es la cantidad de grasa dónde se encuentra la principal diferencia junto con algunas ligeras diferencias nutricionales. Ahora bien, una clave está en la cola. Los pescados blancos tienen una cola plana y redonda y los pescados azules la tienen en forma de flecha. Si aún así no te aclaras, te facilitamos el siguiente listado de pescados blancos: Abadejo, Bacalao, Besugo, Dorada, Fogonero, Gallineta, Lenguado, Lubina, Merluza, Mero, Panga, Pargo, Palometa, Rape, Rosada, Tilapia…

El pescado blanco es muy versátil, gracias a su sabor suave y textura fina. Se puede preparar de muchas maneras sin perder sus propiedades nutritivas, así que aquí te dejo un listado de recetas de pescado blanco. Se pueden preparar a la brasa, al horno, plancha, vapor, en guisos, fritos y acompañados de mil salsas. Combina con todo y también son perfectos para elaborar preparaciones como albóndigas, croquetas, buñuelos o incluso Nuggets. Te deseamos un buen inicio de dieta si éste es tu propósito, pero no escatimes la ayuda de un buen pescado blanco, porque ahora estamos en invierno. 🥶