Se nos adelanta el verano y con ello las ganas de organizar comidas y cenas al aire libre. Siempre que va llegando esta época del año, vamos recurriendo a la barbacoa y la parrilla. Pero uno de los principales problemas a la hora de preparar mariscadas a la parrilla es que pensamos que solo consiste en poner el marisco sobre la parrilla con carbón o leña y esperar a que se cocine. Esta opción solo te lleva a que algunos mariscos queden crudos y otros demasiado secos. En primer lugar comprar marisco de calidad es una de las claves que has de tener en cuenta. Utiliza sal gorda para agregar a los mariscos. Es mejor el uso de parrillas con un grosor fino. No dejes de controlar las parrillas, ya que la barbacoa de mariscos se hace bastante rápido. Si vas a preparar langostinos, por ejemplo, que son imprescindibles en cualquier parrillada de marisco gourmet, te recomendamos que los peles y que dejes solo la cola. Espera a que la parrilla esté bien caliente antes de colocarlos. Vuelta y vuelta es suficiente para que queden crujientes por fuera y jugosos por dentro.
La langosta es otra de las grandes protagonistas de una buena barbacoa de marisco gallego. Debes cortarla por la mitad, añadir el aliño que quieras usar (un poco de aceite y un diente de ajo es suficiente para que no afecte a su sabor) y ponerla en la parrilla bien caliente con su carne hacia las brasas. En cuanto empiecen a caer gotas de agua, dale la vuelta y déjala varios minutos más. Este marisco necesita toda tu atención, ya que debes evitar que se haga demasiado, pero sin quedar crudo. Los mejillones adquieren un sabor muy agradable y se preparan fácilmente. Sólo tienes que colocarlos con la concha hacia las brasas e ir comprobando su cocción a simple vista. Si vas a usar algún tipo de aliño o adobo, añádelo cuando ya estén sobre la parrilla. Observa el color que van adquiriendo y controla la jugosidad.
¿Qué mariscos destacamos?
La centolla gallega es una delicia que debes incorporar a tu propuesta de surtido de mariscos gallegos a la parrilla. Lo habitual es quitarle las patas para asarlas por separado y abrir la parte central para asarla durante algo más de tiempo. Es recomendable partir las patas por sus articulaciones, lo que te permitirá ver la carne y su punto de cocción. La parte central solo tienes que ponerla con la concha hacia las brasas y aliñarla a tu gusto. Ten paciencia y comprueba que la carne está asada por igual en toda la concha antes de servirla. Las navajas gallegas son siempre recomendables para completar la gama de sabores y texturas. Es aconsejable meterlas una hora en agua salada y luego pasarlas por agua hirviendo durante unos minutos hasta que se abran.
Tras secarlas, barniza la carne con un poco de aceite y pon la concha hacia el fuego. Una vez más, la observación directa de la textura que va adquiriendo la carne es fundamental para poder paladearlas. Las nécoras gallegas se pueden cocinar enteras fácilmente. Solo tienes que engrasar la parrilla y colocarlas ocho minutos con la carne hacia arriba. La misma cantidad de tiempo con la carne sobre las brasas será suficiente para poder disfrutar al máximo de un marisco tan exquisito como delicioso. Aunque hayamos hecho esta selección de mariscos, también existen otros con los que puedes hacer una barbacoa de mariscos como almejas, vieiras, cangrejos o gambas.
¿Y qué pasa con el maridaje?
Esta es otra de las preguntas qué nosotros también nos hacemos. Si bien todo el mundo respondería que el vino blanco a una temperatura fría es la mejor opción, ahí entran en juego distintas denominaciones de origen, una variedad de sabores poco recomendable y otros factores que han de evitarse si lo que quieres es que el vino subraye, y no empañe, el sabor del marisco elegido. Dentro de lo posible, nosotros te aconsejamos las siguientes referencias de vino gallego para que conviertas tu mariscada en una experiencia gastronómica única: Señorío del Sobral: Un Rias Baixas que tiene toques tropicales y en su regusto recuerda a frutas, como los albaricoques. Su acidez no es excesiva, lo que te ayuda a no perderte ni un matiz gustativo del marisco que vayas a comer. Terras Gauda: Comparte denominación de origen con el vino anterior y se caracteriza por mezclar uvas como la albariño y la loureiro, entre otras. El resultado es un vino suave, agradable y siempre perfecto para que el sabor del marisco sea protagonista.
Puedes preparar parrillada de mariscos fácil y añadir a la parrilla otros ingredientes como pescados o verduras a la brasa. Además, puedes agregar diferentes salsas o aderezos, por ejemplo salsa verde, tártara, mahonesa, perejil, ajo, limón o aceite de oliva. Por ultimo te queremos recordar que para disfrutar de mariscos a la parrilla como los arriba indicados, puedes confiar en nuestra experiencia. Acércate por nuestro local y consúltanos para organizar una parrillada de lujo con un marisco fresco y especialmente seleccionado para ti. Ya sea con amigos o familiares, el marisco te permite estar un buen rato en compañía de quien prefieras y que todos podáis disfrutar de uno de los productos más típicos de nuestros mares.
